viernes, 15 de septiembre de 2017

Y Todo Vuelve a Empezar by Char G.

De repente mis sentidos empiezan a cobrar vida. Siento los aromas del lugar, del césped recién cortado, del jazmín en época de verano, algún perfume francés. Mis pulmones comienzan a llenarse de aire de a poco y aunque cuesta mantener el ritmo mi respiración vuelve a ser constante. Comienzo a distinguir el gusto y recobro el sentido del tacto, puedo darme cuenta que me encuentro boca abajo y siento las asperezas del suelo donde me encuentro tirada. Me doy vuelta gracias a una fuerza externa a mí, como si alguien tratara al mismo tiempo que yo darme vuelta.

Mis ojos comienzan a abrirse y poco a poco las formas se ven más nítidas, veo gente a mi alrededor, me hablan pero no puedo oírlos, solo escucho murmullos, los miro como desentendida y desorientada, no entiendo que ha sucedido. Y miro sus caras y trato de leer sus labios pero me es complicado interpretarlos. Comienza a invadirme la desesperación y aturdida de tanta incomprensión recobro de a poco más fuerzas, me cuesta pero me doy vuelta. Apoyo mis manos sobre el áspero cemento en donde me encontraba tirada e intento ponerme de pie pero no lo logro, mi equilibrio me ha fallado y caigo. No contenta con ésto, ya que no soy una persona que se da por vencida, rápidamente vuelvo a repetir la acción y ésta vez logro ponerme de pie pero estoy muy débil, mis músculos me están jugando una mala pasada. 
Los veo ahí, todos me miran como desconsolados y angustiados, me pregunto que está pasando, me desespero cada vez más, la angustia oprime mi pecho y mis lágrimas comienzan a caer recorriendo mi rostro y ahí de repente logro gritar y cada vez lo hago con más fuerza, veo que todos lloran y eso me angustia aún más.
En medio de tanto disturbio veo a una mujer morocha de pelo largo y grandes ojos. Su cara me es conocida, ella camina hacia mí, viene y me toma de ambas manos. Sé que la conozco, de eso estoy más que segura, pero me encuentro confundida y no la reconozco en ese momento pero su cara me es familiar. Viene hacia mí y acerca su boca a mi oído como queriéndome decir algo, alcanzo a escuchar su nerviosa y temblorosa voz diciéndome por qué lo había hecho pero sinceramente no comprendía su pregunta. ¿Había hecho qué?
Ante su pregunta me encuentro desentendida y bajo mi cabeza y allí fué cuando lo vi, justo debajo mío veo en el suelo un revólver, pero no me animo preguntar nada, me encuentro con mucho miedo y aturdida por la situación me alejo de aquella mujer y del revólver que se encontraba a nuestros pies. Entonces doy un giro de 180° y  veo ahí caído, a unos metros de dónde se encontraba aquel arma, en el suelo de la plaza a una persona, la cual nosé si estaba viva o muerta. 
Y me pregunto quién era la persona a la que supuestamente yo había matado, si es que estaba muerta, no lo sé. Por qué yo había cometido semejante aberración, acaso algo se apoderó de mí esa tarde? 
Sinceramente no lograba entender nada de lo que había sucedido, estaba en estado de shock pero aun así camino muy lentamente en dirección al cadáver con una mezcla de nervios y miedo llego a donde estaba tirado. Se encontraba justo al lado de mis pies y estaba boca abajo. No podía ver quien era. Entonces me agacho con cuidado. La gente que estaba en la plaza se acerca y quedamos todos rodeando a la persona que estaba tirada en el frío cemento de aquella plaza. 
De repente toco su hombro y logro ponerla de costado y ahí la vi a ella. No podía creer que estaban viendo mis ojos, no podía entender lo que estaba pasándome, estaba consternada ante tal situación.
De repente el supuesto cadáver abre los ojos y nos mira. Yo desesperada le hablo y ella entre desentendida y desorientada no entiende lo que ha sucedido. Entonces trata de darse vuelta y levantarse pero cae sin fuerzas e invadida en pánico intenta  nuevamente levantarse por sí sola y lo logra. Me mira y no me reconoce, entonces llorando me acerco hacia ella, le tomo la mano y le pregunto nuevamente que ha hecho. Y todo vuelve a empezar...
Desearía poder saber que estará pasando por la cabeza de ésta pobre mujer, en este preciso momento. 

Char G





Abriedo Puertas by Char G.

Despierto y  mis ojos divisan una puerta de hierro en la mitad de la noche y voy hacia ella, la abro y me dirije hacia una escalera con destino incierto, a medida que voy de escalón en escalón la luz se va disolviendo. Llego entonces a distinguir una puerta de madera entre abierta. Y como soy de esas personas inquietas que les gana la curiosidad me intriga y entonces  mi mano en dirección al picaporte de hierro comienza a abrirla. Inquietante y algo asustada siento como de a poco mi corazón comienza a latir con mas fuerza, las pulsaciones se aceleran, las manos me transpiran y siento un frío sudor en la nuca.
No sé que habrá detrás de esa puerta voy camino a lo incierto. Y entonces entro... Llego a un lugar donde la oscuridad es lo que abunda, no veo nada.  Mis pupilas se dilatan y comienzo a distinguir de a poco formas no muy claras y poco a poco mis ojos se acostumbran a la ausencia de luz visible del lugar. Y entonces ahí está, veo a alguien sentado en una silla, no pude distinguir su cara, pero si escuchar su escalofriante voz que  repetía mi nombre y se acercaba cada vez más a mi. Aterrorizada, no intenté hablarle ni tampoco quise saber quien era, me asusté y cobardemente salí corriendo de aquel terrorífico lugar. Asique me di vuelta, abrí la puerta, bajé las escaleras, crucé la puerta de hierro que me había intrigado aquella noche, corrí, corrí y seguí corriendo hasta que de pronto me desperté en mi cama.

Char G.



jueves, 7 de septiembre de 2017

Círculo Vicioso by Char

Detrás de la ventana el afuera
en el afuera las veredas
en las veredas los árboles
en los árboles las ramas
en las ramas las flores
en las flores una nariz que respira
en la nariz que respira una persona
en la persona unos ojos
en los ojos una mirada
en la mirada el sentimiento
en el sentimiento la emoción
en la emoción un estímulo
en un estímulo la mano que escribe
en la mano que escribe una lapicera
en la lapicera la tinta
en la tinta el papel
el papel en la mesa
ea mesa en el cuarto
en el cuarto la ventana…

Char G.


martes, 5 de septiembre de 2017

El Temer by Char G.

Le temía y se temía, porque se daba cuenta que algo muy en su interior le estaba sucediendo, se enojaba porque sabía que no tenía que permitir que ese hermoso y peligroso sentimiento, se apodere de su cuerpo. A medida que iba conociendo como era él terminaba muriéndose un poco más cada día. Le daba temor porque últimamente todo se le iba de las manos. Y es que hace rato ella había cerrado con la puerta que la protegía de los sentimientos, esos que van directo al alma, que aparecen y te agarran desprevenidos, y que cuando te quieres dar cuenta, ya es demasiado tarde y se vuelven incontrolables. Era uno de esos sentimientos que le daba tanto miedo aceptar, pero que la hacían bien sentir, la llenaba de vida, de alegría y esperanzas, pero principalmente de dudas, miedos e incertidumbres.
Aquella coraza que se había puesto desde un principio estaba desapareciendo poco a poco, y se comenzaba a sentir cada vez mas indefensa e insegura, tenía miedo de dejarse llevar, dejarse caer y volver a sufrir como le había sucedido hace tiempo atrás. Pero sin querer él ya se le había filtrado por los poros de su piel, recorriéndola; lo sentía fluir por sus venas hasta llegar directamente a esa puerta que había cerrado; él de a poco y sin quererlo logró abrir esa puerta y le disparó directamente al corazón. Cada noche que pasaba con el le gustaba más y más.
Y enfurecía, era un enojo con ella misma, porque sabía desde un principio frente a quien se estaba exponiendo. Ella pensaba que iba a poder controlarlo todo, pero lamentablemente se había equivocado. Y es que lamentablemente éstas cosas suceden así, son incontrolables. Y es que lo que sale del corazón es imposible quitarlo así nomas. Y por eso se enojaba, por permitir dejar entrar sentimientos que después podrían llegar a dañarla.
Para él ella era la segunda opción de un triángulo, y lo sabía, lo asumió desde el primer día que lo besó y es que desafortunadamente él no se encontraba sólo, pero a la vez sí lo estaba. Era visitado de vez en cuando por el cuerpo de otra mujer, y a medida que pasaba el tiempo a ella le empezó a pesar ésta situación, el solo hecho de pensar que mientras que ella lo pensaba a kilómetros de distancia, él podía estar con otra, eso sí, la atormentaba profundamente. Pensaba en cómo sería ella, y sobre todo como él la veía, y fue ahí cuando dió cuenta que algo había cambiado. Tenía miedo de que a su regreso, él no la quiera ver más. Tenía miedo a ser olvidada.
Le temía a él, a su percepción de ver mundo, le era inevitable no pensarlo, ya que todo lo que la rodeaba no hacían otra cosa más que llevarla directamente a su lado. Las ganas de estar con él aumentaban, ganas de abrazarlo, besarlo, dormir junto a él. Temía cada vez más porque se sentía bien al lado suyo, se identificaba con él, se enojaba por algunas acciones de él y sin embargo aún así, sencillamente tenía la capacidad de alegrarle la mañana, la tarde, la noche, el día con un simple hola.
Hasta qué una mañana del mes de abril vio un mensaje que le hizo tomar una decisión, un simple saludo de cumpleaños le hizo darse cuenta que sus temores se convirtieron en realidad...Él ya no estaba solo. 
Entonces se dio cuenta que estaba demás en su vida y que debía alejarse, ella ya no se merecía ser la segunda de nadie. No estaba dispuesta a serlo. Fue así como tomó un lápiz y un papel, y le envió esta carta a él para decirle que hasta acá había llegado, que tomó esta decisión porque sabía que si se permitiese estar una noche más con él sería como meter el dedo en la llaga. Ya no quería dejar que una mínima caricia, un beso, una mirada la hagan más vulnerable de lo que se había convertido estando con él.

 


lunes, 4 de septiembre de 2017

DEJARSE SER by Char G

Despegarse
despojarse
deshacerse
para luego derretirse
y desaparecer sin movernos del lugar
ese, seguramente ese...
ese el mejor momento
ese instante  y espacio
en donde todo estalla
el silencio resuena
y nos muestra el universo
tal cual es para luego
DEJARSE SER.