Estación de trén, triste y solitaria, estación. En dónde algún día esperé un abrazo tuyo.
Ahí en el andén, me siento, y estoy a la espera de que sabe que cosa.
Y no tengo rumbo, no tengo dirección, sólo espero.
Tan solo aguardo que alguien vega por mí y llegue el día en el que al fín las penas se vayan a bordo de algún vagón. Y vuelva a ser felíz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario